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Clasificación

Precio/servicio

Bodega

Cocina

Dirección

Colima 168, México

Blanco Colima: Un must de la Roma

La pureza del color Blanco, rinde honores al nombre del  restaurante, Blanco Colima, te sorprenderá la belleza arquitectónica, la esmerada y delicada decoración, atención a las lámparas y por supuesto, su gastronomía, bajo un ambiente muy trendy y selecto.

Es uno de los restaurantes imprescindibles de la Colonia Roma, ubicado en una señorial casa Porfiriana, donde la gastronomía y el arte van de la mano.

Blanco Colima, es otro proyecto del Grupo GS, que lleva apenas un año con gran éxito, al igual que el resto de sus establecimientos formado con gran ilusión por la familia que comenzó CaroloEl Aduanero, Le Macaron BoutiqueBlanco Bistro, además de las reconocidas tiendas de decoración Dupuis y Becara y Estudio 240.

El restaurante se divide en diversos espacios con ambientes muy distintos, llamados: Belafonte, Lázaro y Colima,  donde podrás disfrutar desde un aperitivo,  de una comida, cena, precopeo, drinks & music en el bar, además también de un reservado estupendo para organizar eventos; de hecho, reconocidas firmas de bebidas premium, moda, arte han elegido este sitio para sus eventos.

Esperamos en el salón al calor de un rico tequila Don Julio 70 , viendo gente bonita paseando por los comedores, pasamos a una de las terrazas vip rodeada de vegetación y tranquilidad, donde el chef, Víctor Zárate, se encargó de agasajarnos con su cocina estacional con toques muy internacionales. Relucen platos como las alcachofas, las tostadas, aguachiles, así como los pescados de Ensenada y el entrecote, entre otros, sin faltar la panadería del Carolo tan conocida y reconocida.

Comenzamos el festín de sabores, elegimos las alcachofas a las brasas; tiernas y con mucho sabor, las croquetas de hongos con salsa de cabrales, la salsa muy bien lograda, para hacer honor a la tierrina asturiana; continuamos con el sashimi de robalo con pepino, tomate y un helado de cítricos, espectacular.

No podían faltar las famosas tostadas de atún, todo un clásico de Carolo, el aguachile toreado con aguacate, pepino, rábano y jícama, al más estilo vegetariano y otro en versión marisco,  a base de callo de garra de León de Ensenada con chiles toreados, muy frescos los dos  y la fondue de huitlacoche con serrano, acompañado de pan rústico, impresionante su sabor cremoso, otro imprescindible.

Lo acompañamos de vino Francis Coppola, Sonoma, Valley, Californiaperfecto para maridar el huitlacoche y como hay para todos los gustos,  probamos el de agua del día, a base de limón, pepino y jengibre; una tradición mexicana para quienes no desean beber al alcohol.

¿Y cómo no pedir un irresistible postre?

El fondant o coulant de queso manchego acompañado con helado de guayaba, el queso fundido en boca combinado con el helado, es una explosión de sabores. Y para rematar la copa de carajillo con galleta de chocolate y canela acompañado de cafés y no te olvides de pedir un Gin & tonic, te seducirán!

El ticket oscila sobre 700 pesos, 16 euros aprox.

El servicio es de primera, así que no dejéis de ir a Blanco Colima, no os vais a arrepentir!

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